Sonríe, sísepuede, pueblo, patria… Unidos/as Podemos destruir España

Sr. Turrión, su partido dijo que ningún cargo podemita ganaría más de tres veces el salario mínimo interprofesional, y que donarían el sueldo sobrante… ¿Cuándo lo van a hacer? Y, si alguien lo ha hecho, ¿por qué esas donaciones han ido al partido, en vez de a obras de beneficencia que «rescaten» a la «gente»?

Sr. Turrión, clama usted contra la corrupción, cuando su partido ha sido creado con fondos millonarios aportados por gobiernos extranjeros, y al parecer en paraísos fiscales; cuando el Potter Errejón ha cobrado por un trabajo que no realizó para la Universidad de Málaga; cuando el Monedero ha tenido que hacer declaraciones complementarias para quedar a bien con Hacienda; cuando usted ha pagado en negro a los trabajadores de su empresa «Con mano izquierda».

Sr. Turrión, dice usted que Podemos es «la gente», cuando la banda que ha organizado está formada por niñatos pijoprogres, hijos de funcionarios, que han ido de la ceca a la meca becados con los potosíes de los mismos bancos a los que acusa de robar al pueblo. Gana usted más de 100.000 euros ―¡y le devuelve Hacienda!―, la Bescansa es millonaria, y el Monedero suelta a tocateja un cuarto de millón de euros para que Hacienda no le empapele… ¿Gana eso «la gente» de nuestro país?

Sr. Turrión, en sus ansias de megalomanía también pretende apropiarse de la palabra «Patria» ―me asombra que las femibolleras no hayan puesto el grito en el cielo, acusando de machismo patriarcal esta palabra, proponiendo «matria» en su lugar―. ¿Cómo puede usted ser tan hipócrita de hablar de Patria, cuando su partido muestra cada vez más simpatías proetarras, haciendo del impresentable Otegi una especie de mártir gandhiano de la paz? ¿Cómo puede usted hablar de Patria, cuando pacta con independentistas, cuando defiende el derecho de cada autonomía a hacer lo que le dé la gana, reconociéndolas el derecho de autodeterminación?

Sr. Turrión, se emborracha usted hablando de la Patria, mientras sacraliza el multiculturalismo que arrasa nuestros valores y diluye nuestra identidad nacional, jaleando Ramadanes y marginando Semanas Santas; cuando sus gestapos escrachean a los taurinos mientras defienden el aborto libre; mientras sus secuaces dicen que la Hispanidad es puro genocidio; mientras sus monaguillos vienen a decir que ser patriota es lo mismo que ser facha; mientras dice usted que el himno español es una «pachanga fascista», y la Constitución un simple «papelito».

Sr. Turrión, habla usted de derechos humanos, mientras su partido ha sido financiando por dictaduras venezueloiraníes. Habla usted de derechos humanos, mientras los matones afines a su banda apalean disidentes, mientras los gorilas antisistema escrachean, acosan, insultan; mientras defiende usted al Bódalo, a Alfon ―el tipo de la mochila cargada de metralla―; mientras anima a seguir el ejemplo de Rita «la quemaora», pues usted parece no incluir dentro de los derechos humanos el de la libertad religiosa.

Sr.Turrión, en su partido se sacraliza el feminismo, y las leyes de identidad de género, mientras reciben fondos de países donde se lapida a los homosexuales y se margina y maltrata a las mujeres; mientras callan ante quienes hacen un llamamiento a violar monjas, ante quienes apalean a unas voluntarias por el simple hecho de apoyar a la selección española de fútbol.

Sr. Turrión, dice usted que Podemos «rema en la misma dirección» que el Vaticano. En su afán enfermizo por ser presidente a cualquier precio, piensa usted que la Moncloa bien vale una Misa, mientras apoya a quienes dicen que el Papa no les deja comerse las almejas, a quienes gritan histéricamente que «contra el Vatikano, poder clitoriano». Sí, en la misma dirección, cuando Podemos quiere cargarse el Concordato, acabar con la enseñanza concertada de ideología católica, expulsar la religión de la enseñanza, quitar la casilla de la declaración de Hacienda que asigna fondos a la Iglesia. Ésa es la dirección en la que también rema el Vaticano, ¿no?

Sr. Turrión, promete usted «rescatar a la gente» de los recortes, de la crisis. Sin embargo, pretende usted privar de fondos a la Iglesia, la institución que ahorra al Estado 32.000 millones de euros al año, que más ha rescatado a la gente desde que el mundo es mundo, con su inmensa obra de beneficencia y asistencia a los pobres, mientras los sociatas y comunistas machacaban al pueblo en gulags, purgas y desabastecimiento.

Sr. Turrión, promete usted subsidios, ayudas, subvenciones, sueldos compensatorios… Una Jauja arcadiana paradisíaca: «un país nuevo». Sí, ustedes, niñatos incompetentes, embusteros consumados, populistas zafios, recién llegados a la vida política, van a encontrar la piedra filosofal que transmuta la crisis en abundancia, el déficit en superávit, la deuda en riqueza. Van ustedes a conseguir que los ricos financien a los pobres por puro altruismo, que Bruselas les conceda mejores condiciones sobre el cumplimiento de los porcentajes de déficit, que los mercados les bajen la prima de riesgo, que un país con un déficit de más del 100% del PIB aumente enormemente el gasto ―más de 100.000 millones de euros en 4 años―.

Sr. Turrión, habla usted de los derechos de los trabajadores, mientras propone la supresión de las vallas fronterizas, la inmigración libre y sin trabas, la supresión de los CIES… Cuando usted sabe que la inmigración descontrolada ha producido una bajada en los salarios y los derechos laborales de los trabajadores españoles. Por si fuera poco, la inmigración irregular también se aprovecharía de las ayudas y subsidios, que usted sacaría de los fondos sustraídos fiscalmente a las clases medias y bajas con el IVA al 25 %, la subida del IRPF, los impuestos indirectos y otras exacciones.

Sr. Turrión, promete usted sonrisas heidianas, corazoncitos melifluos, mientras apoya movimientos antisistema que usan como armas la blasfemia, la okupación, el tuiterismo agresivo, las golpizas, las marionetas, las procesiones coñoinsumisas, el desenterramiento del guerracivilismo, la poesía de las madresnuestras, el mobbing a obispos díscolos y a periodistas críticos…

Sr. Turrión, usted es solamente un embaucador que se aprovecha de la ignorancia y el borreguismo de un pueblo adormecido, sin pulso, idiotizado por unos medios de comunicación vendidos a las mafias y sectas plutocráticas que le han comisionado para que lleve a España al Kaos, a esta Patria defensora inveterada de la civilización cristiana que ―precisamente por eso― usted y los prebostes que le mandan quieren destruir.

Sr. Turrión, habla usted de «pueblo, patria, Unidos/as Podemos»… Podemos… ¿qué? ¿Destruir España? Pues sí, pero podemos estar tranquilos los españoles: quien nos desconectará de la Historia será la «máquina del amor», en una eutanasia feliz de corazoncitos, sonrisas, y «sísepuedes».

(*) Laureano Benítez Grande-Caballero es escritor y ha publicado 29 libros

http://laureanobenitez.com/laureano_benitez_grande_caballero.htm