El yo conquistado

Yo la he conocido a través de un amigo común, conferenciante, filósofo y pintor, un hombre muy bueno, muy sensible y muy profundo que nos reúne a un grupo de unas sesenta personas en un salón habilitado por la Orden Claretiana y cercano a Rosales donde imparte clases magistrales generalmente sobre temas filosóficos, psicológicos y de espiritualidad. Al finalizar esas charlas, un grupo muy reducido de unas diez o a lo más quince personas nos vamos a tomar unas bebidas a un pub cercano, a “Charing Cross”. Se da la circunstancia de que el nivel cultural es elevado y la amistad generada muy grande. A ese grupo se le llama “La Stoa”, y el apelativo se lo ha puesto precisamente ella.

Pero volviendo al tema, el libro del que hablo va a producir un hondo impacto en el lector, pues se trata de un sinceramiento profundo ante el espejo que es el lector de toda la manifestación del ser de la autora en su plenitud física e intelectual. Como en el Big-Bang la escritora desarrolla a lo largo de las páginas blancas una cascada de estrellas que como una ola arrebatadora va abriéndose camino a través de los estratos del ser y a cada nuevo envite aparece ante nuestros ojos un nuevo paisaje polimorfo como si se tratara de un viaje estelar a través de los planetas.

Tal es la fuerza del libro, su claridad y perfección. Entronca con lo mejor de las escuelas clásicas y modernas, con la edad de oro y el perfume de lo kitsch, de lo más actual.

Vista en la reunión de la Stoa, es brillante, elegante y muy protagonista, lo que produce en alguna gente no sé, cierta inquietud, a mí me divierte y a la vez me fascina, pues sé que se ha dejado el pellejo en defensa de esas mujeres indefensas y humilladas de todos los tiempos con fuerza de heroína y que sin embargo en su más profunda esencia se siente muy sola, una soledad muy típica y buscada en todo creador, y es ese desgarramiento existencial el que hace precisamente de este libro, “El yo conquistado” una pequeña gran obra maestra quizá con alguna imperfección, pero para mí con el sabor intenso de “El extranjero” de Camus y el acabado de “Del sentimiento trágico de la Vida” de Unamuno.

Un placer leer a Antonieta, como la llaman sus amigos más íntimos.

(*) Germán Ubillos Orsolich

Nació en Madrid y es Premio Nacional de Teatro. Premio Guipúzcoa de Teatro, Premio Provincia de Valladolid de Teatro, Premio Julio Camba de Periodismo, Premio “Correo Español – Pueblo Vasco” de Periodismo, Premio Ciudad de Zamora de Periodismo, Finalista Premio Nadal de Novela, Guionista de Televisión Española Espacios Dramáticos. Es autor de varias novelas entre ellas: “Largo Retorno” (Con filme de Pedro Lazaga y música de Antón García Abril) “Proyecto Amenazante”, “Cambio Climático”. “Cambio Climático – Los Supervivientes”, “Cambio Climático – El Retorno” (Trilogía),(Ed. Entrelíneas Editores), El viajero de sí mismo”, “Malín”, “La Peste Negra – Vida más allá de las estrellas”, “La calle de los Amores” (biografía), “El hielo de la Luna”, “Los desiertos de Marte”, “La calle de los amores “(Memorias).- Ed. Belgeuse, “ Más allá del Purgatorio (Novela), Ed Belgeuse , “La Infancia Mágica “ (Biografía).- Ed. Belgeuse Es autor teatral y algunas de sus obras son: “La Tienda” (Ed. Escélicer)- Premio Nacional de Teatro, “El llanto de Ulises” (Ed. Escélicer)- Premio Guipúzcoa, “El Cometa Azul”, “Gente de Quirófano” (Ed. La Avispa) Premio Provincia de Valladolid, “Los globos de Abril” (Ed. Escélicer)