"Ahora me sumergiré en esta preciosa aventura. Intenten ser felices", ha añadido en otro tuit posterior. Las críticas e insultos se han redoblado, sorprendentemente, este martes, dos días después de la gala, en las redes sociales con comentarios e insultos de diversa índole que se han retroalimentado.
Entre las críticas más insospechadas que ha recibido la gala de los Goya y, en particular, un comentario de Rovira, se encuentra la formulada por la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN). En un momento de la noche, el presentador y actor protagonista de Ocho apellidos vascos dijo: "Si a mí me dicen que le van a subir el IVA a los yates, no pasa nada, porque no tengo yate. Pues lo mismo le pasa a Montoro con la cultura". Estas palabras han causado "un profundo malestar" en el conjunto del sector náutico español, según una carta que el organismo ha enviado a Antonio Resines, presidente de la Academia de Cine, organizadora de la gala.
También los guionistas se han quejado por el trato desigual al no poder desfilar por la alfombra roja, como otros nominados. Además, los internautas han cargado las tintas contra el discurso del presidente de la Academia de Cine, Antonio Resines, en contra de la piratería.
Muchos de los comentaristas de televisión, sin embargo, han destacado el trabajo de Rovira como uno de los aspectos positivos de una gala que adoleció de falta de ritmo.
La ceremonia de entrega de la 30ª edición de los Premios Goya fue seguida a través de La 1 de TVE por 3,9 millones de telespectadores (un 25,8% de cuota de pantalla) y fue la más vista desde 2011.