"El cuerpo si lo cuidas, te puede durar toda la vida" (V)

Como ya tiene Ud. algún rodaje es tiempo entonces, que comience a introducir algunas variantes en su rutina, que irán incorporando de manera gradual, otros grupos de músculos que hasta ahora han estado semi-inactivos.

Las sesiones de cinco o diez minutos y tres veces por semana, de estas dos últimas semanas, han estado dirigidos en exclusiva a la zona del abdomen por ser ésta, la que más tiempo demanda hasta conseguir ponerla en forma.

La zona abdominal es posiblemente la más dura para trabajar debido a que el tejido graso y adiposo que se localiza en esta parte del cuerpo se asienta con mucha facilidad y en la práctica ésta, tiene poco trabajo muscular. De ahí que los resultados, aún con un programa intenso de entrenamiento, no son visibles hasta pasados dos o tres meses y esto, contando con que la tripa sea razonablemente abultada.

En aquellos casos rebeldes, el tiempo a emplear para poner a punto la zona abdominal puede tomar incluso cinco o seis meses, por lo cual es muy importante tomar como objetivo primordial, antes de atacar el resto del cuerpo, el conseguir primeramente un mejoramiento de los músculos abdominales.

Atacar de manera frontal la grasa abdominal

El mejoramiento del estado físico en general, pasa por dos condiciones básicas. Una, al interior del organismo, es decir, Ud. se siente físicamente mejor, se cansa menos, es más ágil y definitivamente, no echa las tripas por la boca, si tiene que correr para alcanzar el autobús, o tiene que subir las escaleras del Metro. La otra condición, es mostrar un mejor aspecto y este pasa ineludiblemente, por una reducción visible de la zona abdominal.

No es posible tener un aspecto de buen estado físico si lucimos una tripa abultada. Por lo tanto hay que insistir todo lo que haga falta, para mejorar en primer lugar esta zona de nuestro físico. Lo demás vendrá casi por consecuencia, aún cuando es necesario también dedicarle atención específica a brazos, piernas, pecho y espalda.

Introduciendo variaciones en los abdominales para mayor eficacia.

Hasta ahora, hemos estado haciendo únicamente elevaciones de torso hacia adelante, sin más complicaciones. A partir de ahora, debemos introducir una variante que tendrá un efecto directo sobre los músculos laterales de la zona abdominal y que también son muy duros de trabajar. Estos músculos son los que dan el aspecto sólido a la zona por cuanto consiguen reducir el perímetro de la cintura dando un aire de esbeltez y eliminan el antiestético aspecto de michelines "cayendo" por encima del pantalón.

La manera de realizarlos es prácticamente la misma, sólo que en esta ocasión al elevar el torso, debe dirigirse, en lugar del frente o centro, hacia un lado primero, y luego al otro, alternadamente, hasta completar el tiempo en que Ud. esté ahora mismo, trabajando.

Puede hacer las elevaciones alternadamente, o simplemente dividir el tiempo, y dedicar la mitad del mismo al lado izquierdo y la otra mitad al derecho. Por ejemplo, si Ud. actualmente está dedicando diez minutos a su rutina, emplee cinco minutos para los abdominales a la izquierda y cinco a la derecha.

Es conveniente que sepa que como se trata de trabajar un grupo de músculos nuevos, experimentará otra vez, agujetas a ambos costados de los abdominales y tendrá dificultades para realizarlos porque son ejercicios difíciles y que exigen cierta destreza y dominio, pero esto llegará al cabo de un par de semanas, por lo tanto, no se preocupe y comience desde ya a realizar sus abdominales en la forma señalada: la mitad del tiempo a la izquierda y la otra, a la derecha. Hágalo así durante todo el mes y verá como a partir de ahora, nota que los progresos son más rápidos y visibles.

Fijarse metas cada vez más altas y aumentar las repeticiones.

Si bien en capítulos anteriores dijimos que era conveniente ir aumentando gradualmente el número de repeticiones sin exagerar, cuando lleve dos semanas haciendo los abdominales a un lado y otro, será conveniente fijarse ya una meta definitiva que servirá tanto para conseguir su objetivo como para establecerla como programa de mantenimiento, a partir de fin de año.

Es preciso que se esfuerce en conseguir hacer en el plazo más razonable posible, cien repeticiones a la izquierda y cien a la derecha. Como será difícil que pueda hacer las cien repeticiones de una sola vez, puede hacerlas en cuatro series de veinticinco cada una, con un mínimo descanso entre una y otra, para recuperar el aliento. Cuando lo consiga, quédese ya definitivamente en ese número: doscientos abdominales en total. Esta cantidad de repeticiones conseguirán hacer de Ud. en breve tiempo, una persona completamente nueva con un excelente estado físico para acometer otros ejercicios destinados a fortalecer sus brazos, piernas y espalda.

En próximas entregas, introduciremos otra variación e incorporaremos ejercicios para los brazos (bíceps, tríceps, antebrazos), hombros, piernas y espalda.

Recuerde que todo es cuestión de perseverancia y no deje que el desaliento le acometa si todavía no aprecia resultados visibles. Piense que si durante toda su vida ha tenido una vida sedentaria y poco activa físicamente, no puede revertir esa situación en dos meses, esto exigirá con seguridad, algo más, pero también es cierto que mientras más se prolongue en el tiempo su rutina de ejercicio, mayores serán los beneficios y una vez que consiga su propósito, su cuerpo acostumbrado al trabajo físico, le demandará muy poco tiempo y esfuerzo para mantenerse en forma. Sólo hay que conseguir llegar a la meta, el resto será muy fácil.