La Unión Romaní denunciará al gobierno francés ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea por la expulsión de gitanos a sus países de origen, Rumania y Bulgaria, del que esperan que dicte una sentencia "ejemplar y condenatoria".
El presidente de la Unión Romaní, Juan de Dios Ramírez Heredia, hace este anuncio en un duro comunicado contra el gobierno que preside Nicolás Sarkozy y contra el resto de jefes de Estado y de Gobierno de la UE "por perderse una vez más en una maraña de palabras" y no condenar abiertamente las expulsiones.
Para la Unión Romaní "es evidente" que Francia "ha violado los derechos fundamentales de los ciudadanos de la Unión Europea" y actuado "de forma discriminatoria" contra los gitanos rumanos y búlgaros residentes en su territorio.
Ramírez Heredia aplaude la actitud abiertamente en contra de lo ocurrido de la comisaria de Justicia, la luxemburguesa Viviane Reding, y su convencimiento de que "la Comisión no tendrá otra salida que abrir un procedimiento de infracción contra Francia".
El presidente de la Unión Romaní reconoce que Sarkozy "ha ganado la batalla, pero no la guerra", y critica especialmente a los presidentes de Bulgaria y Rumania por permanecer "callados como muertos" ante lo ocurrido.
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