Las que vivían sus abuelos, agricultores, en Muelas del Pan y Ricobayo de Alba dedicados al campo y sin comodidades y la que vivía ella en el POBLADO DE IBERDROLA, con sus padres y hermanos, una vida de confort y hasta de lujo ya que los poblados de esta importante empresa nunca escatimaron nada a sus empleados. Manifestó que fue una experiencia impagable y enriquecedora que aportó mucho a su vida.
También habló del paisaje, ubicado en un entorno granítico y espectacular que estimuló mucho su imaginación y que contribuyó a sus vocación literaria y en el que percibe y siente como en ningún otro lugar los cuatro elementos de la naturaleza como son: el fuego, el agua, el aire y la tierra. “Un lugar, dice Concha, al que siempre se desea volver"
Concha Pelayo. Es Escritora. Miembro de AECA y FEPET.