El Tango Sigue Vivo

En nuestro último recorrido por tierras argentinas y uruguayas hemos podido comprobar lo que es para sus habitantes este baile que tiene su rango esencial en la pareja enlazada en un abrazo evolucionado en la calle, en la pista de baile o en cualquier escenario, siguiendo la improvisación de los bailarines al influjo de la melodía y el compás.

Carlos Gardel, cuya paternidad se siguen discutiendo los argentinos y uruguayos, fue el que logró elevar a lo más alto su canción propiciando la aparición de variadas letras que se cantan por todo el mundo.

Con el paso del tiempo, el tango sigue siendo mucho más que música, canto, baile y poesía. Tiene un valor de identidad histórica, cultural y emocional, que se muestra como como expresión propia de sus habitantes.

Todo el que llega a Buenos Aires tiene que recorrer el barrio de Boca para detenerse en “Caminito”, un singular y colorido enclave convertido en foco turístico en el que el tango es el auténtico protagonista y al que los visitantes se acercan para inmortalizar su visita en una fotografía con pose tanguera.

Y en la capital de Argentina no hay que dejar de acudir a Tango Porteño, ubicado en el edificio “Metro”, que fue propiedad de Metro Goldwyng Mayer, a pocos metros de la céntrica plaza donde se encuentra el Obelisco. Nosotros asistimos a una velada a este lugar que combina una refinadísima ambientación y rescata el puro estilo deco de la época, con un espectáculo en el que toma parte un buen elenco artístico, con una cuidada ambientación.

Tango porteño recrea la época de oro, la década de los años 40, que supo ser el reinado indiscutido del tango, la gran pasión de toda la sociedad argentina. Es un espacio maravilloso donde viven y conviven todos los personajes de esa Década de Oro del tango y nos hace. Volver a vivir ese tiempo donde todo Buenos Aires era Tango.

MILONGAS

La milonga es el espacio dedicado especialmente al baile del tango. Es como se conoce el lugar de encuentro de los “milongueros”, bailarines de tango, en el que expresan su pasión y disfrute de la danza, que se rige por ciertos códigos no escritos, que se respetan, como son la pulcritud en el vestir, el sentido del baile en la pista y el no entorpecer el baile de otras parejas.

El amor y pasión por el tango en Uruguay se plasma en “La Cumparsita”, himno popular y cultural del país desde 1.998. El Gobierno de la ciudad de Montevideo instaló un monumento sonoro en el Palacio Salvo, emblemático edificio de la Plaza de la Independencia, donde se encontraba la confitería La Giralda, establecimiento donde se interpretó por primera vez esta canción de Gerardo Matos Rodríguez n 1.917. Allí, todos los días, a las 12.00 y a las 18.00 horas, se emiten diversas versiones de “La Cumparsita”.

En Montevideo, todas las noches se ofrecen distintas opciones en locales acondicionados para el baile, en los que, en muchos de ellos, al público asistente se le brindan clases de iniciación o perfeccionamiento. Uno de estos locales, con un sabor especial, es el “Fun-Fun”, donde disfrutamos de una agradable velada con el tango de protagonista.

Desde el año 2007 se viene celebrando “La Semana de La Cumparsita”. Además, en Montevideo se promueve la “Sema Gardeliana” en honor del “Zorzal Criollo”, creador del tango canción, que la elevó a su máxima expresión. Otras manifestaciones destacadas son el Campeonato Nacional de Tango Danza sede del Mundial del Tango y los festivales “Viva el Tango” y “Tango Vivo”.

Si, el tango sigue vivo, en Argentina, en Uruguay y en muchas partes del mundo.

Fotos: Diego Caballo y A. del Saja.