Los Butroneros Cutres

1º) La policía ha actuado de una forma impecable, casi diría que genial, sensacional, merecen un ascenso. El haber caído sobre todos los secuaces en la llamada “Operación Púnica” sin que haya habido filtraciones merece un sonoro aplauso. Algo bueno tenemos. Algo bueno nos queda. Cualquier filtración hubiera resultado nefasta a la hora de cazar a tantas ratas y ratones a la vez.

2º) Los delincuentes, los corruptos cuyos nombres no voy a dar pues son del dominio público, desde el más alto jerarca al más modesto ladrón no son más que aficionados. Ni paraísos fiscales, ni mandangas. En un mundo informatizado hasta la médula como el actual, con resortes hasta para conocer a qué hora vamos al váter en Tailandia o en Madrid es obvio (palabra muy utilizada que a mí me molesta) que esas no son maneras de robar. Roban como en la Edad Media o en el siglo XIX sin darse cuenta de que estamos en el XXI y aunque nuestros hijos hayan tenido que emigrar buscando trabajo a miles de kilómetros de distancia de sus hogares estos butroneros de andar por casa no se han enterado de que las cosas ya no se hacen así. Han robado a manos llenas al pueblo llano, lo han desvalijado pero lo han hecho tan mal que hasta sus maldades son cutres, son las maldades de un pueblo un poco cutre, a qué negarlo.

3º) El pueblo está arruinado moral, política y económicamente. El desfalco colectivo ha sido colosal, demasiado cuantioso como para esperar parches Sor Virginia que curen un cáncer terminal.

En el Monte de Piedad el otro día un probo funcionario de ventanilla me decía que no podía comprender como no había quebrado aún en bloque el país entero. Que había que pasar páginas y echarlos a todos fuera.

Yo claro pensaba. ¿Quién les va a echar?. ¿A quién van a poner?. ¿Quién es capaz, quién tiene autoridad para acometer semejante operación quirúrgica, para extirpar un cáncer con metástasis cuya democracia se podrido mucho antes de la cuenta?.

Entretanto la masa infame de butroneros cutres andan por sus pertrechos mientas los cinco millones de parados miran estupefactos y nuestros hijos tan preparados y tan queridos se abren camino a miles de kilómetros de distancia.

(*) Germán Ubillos Orsolich

Nació en Madrid y es Premio Nacional de Teatro. Premio Guipúzcoa de Teatro, Premio Provincia de Valladolid de Teatro, Premio Julio Camba de Periodismo, Premio “Correo Español – Pueblo Vasco” de Periodismo, Premio Ciudad de Zamora de Periodismo, Finalista Premio Nadal de Novela, Guionista de Televisión Española Espacios Dramáticos. Es autor de varias novelas entre ellas: “Largo Retorno” (Con filme de Pedro Lazaga y música de Antón García Abril) “Proyecto Amenazante”, “Cambio Climático”. “Cambio Climático – Los Supervivientes”, “Cambio Climático – El Retorno” (Trilogía),(Ed. Entrelíneas Editores), El viajero de sí mismo”, “Malín”, “La Peste Negra – Vida más allá de las estrellas”, “La calle de los Amores” (biografía), “El hielo de la Luna”, “Los desiertos de Marte”, “La calle de los amores “(Memorias).- Ed. Belgeuse, “ Más allá del Purgatorio (Novela), Ed Belgeuse , “La Infancia Mágica “ (Biografía).- Ed. Belgeuse Es autor teatral y algunas de sus obras son: “La Tienda” (Ed. Escélicer)- Premio Nacional de Teatro, “El llanto de Ulises” (Ed. Escélicer)- Premio Guipúzcoa, “El Cometa Azul”, “Gente de Quirófano” (Ed. La Avispa) Premio Provincia de Valladolid, “Los globos de Abril” (Ed. Escélicer)