Luis Xubero expone “La Rioja, El último Paraiso” en óleos, dibujos y esculturas 

La exposición abarca los siguientes apartados: Los valles; Los ríos; Los árboles, y Los bodegones, todos ellos den una pintura figurativa, realista, a veces fotogénica, sobre el paisaje o los objetos.

La región de La Rioja es el campo de interés y representación de Luis Ignacio García Gutiérrez, Xubero (Calahorra. La Rioja, 1944), pintura que viene a ser un homenaje y reconocimiento de amor a una tierra. José L. Labandíbar, doctor en Arte e historiador, escribe un breve ensayo en el catálogo titulado “Xubero, el último superviviente” en el que dice:

 “Cuando titula “La Rioja, el último Paraíso”, lo hace como el lugar al que aspira como refugio, en su huida de tanta huida intelectiva, de tanto sofisma existencial, de tanta farsa colectiva y de tal carencia de autenticidad en las que tanto el Arte como la Cultura se han encenagado. Este creador lo encuentra (el refugio adánico) en su Rioja como recurso primigenio y a la vez póstumo, a la manera que el náugrago vital intenta regresar a la Ítaca que lo vio nacer para incardinarse internamente en su acogimiento”.

La pintura de Xubero es hermosa y sublime en sus paisajes grandiosos y solitarios, trae a la memoria la primigenia pintura americana que descubría el territorio. El paisaje abierto, como abstracción, resulta más moderno y actual que los paisajes de árboles, las piedras, los puentes  y ríos, que resultan más decimonónicos.

Los bodegones juegan un papel hiperrealista, donde se pone de manifiesto el dominio de la luz en los objetos y revelan el gran dibujante que, por encima de todo,  es Xubero.

Sorprende sin embargo que su pintura se exponga en la sala Amós Salvador, que en principio, Cultural Rioja había designado para una obra más punta de lanza en el arte de nuestros días, aunque adoleciera de recurrir con excesiva frecuencia a las mismas galerías de arte.