“La Paisana Jacinta” y el “Negro mama”: La polémica continúa

Sin embargo, Jorge Benavides, autor de ambos personajes, aclaró que ni la Paisana Jacinta ni el Negro Mama buscan denigrar al hombre afroperuano ni a la mujer andina. “Son personajes que han salido por coyuntura. No se hace un sketch de la Paisana Jacinta, ella es parte de la Escuelita de los Candidatos y, en ningún momento, nos burlamos de ella. La aparición del Negro Mama ha sido por la noticia del robo de Hermes”, explicó.

El referido robo a la casa Hermes ocurrió en marzo pasado
Trabajador que robó a Hermes se contradice
(publicado en la prensa limeña el sábado 20 de Marzo, de 2010)

“No era mi intención hacerlo. El lunes regresé de vacaciones y al acercarme al cajero, no me habían depositado mi quincena. Me indigné, pues no tenía dinero. Cuando salí a recoger los depósitos en el camión de caudales vi que el portavalores no había guardado en la bóveda dos maletines llenos de billetes. Allí se me ocurrió la idea de robar”.

Así confesó ayer Félix Jesús Luciano Cuenca (39), el supervisor de Hermes, capturado anteanoche, luego de robar el martes 2 millones 422 mil soles.

Luciano dijo que colocó dos somníferos, que él ingería, en las gaseosas que invitó a sus compañeros Sandro Herrera (copiloto) y Jhon Carbajal Vargas (portavalores) antes de tomar los maletines con el dinero. Luego fue a la calle José María Coronel, en Chorrillos, donde abandonó el blindado y a sus compañeros dopados y amarrados. Después tomó un taxi hacia Villa El Salvador y se dirigió a la casa de su hermano Janpier Giovanny Luciano Cuenca, a quien —asegura— le entregó la totalidad del dinero, pero antes agarró algunos billetes y se fue a la playa Conchán para libar y drogarse.

El jueves, luego de conocer por la televisión la recuperación de parte del botín (S/.1,5 millones), pidió garantías a la fiscalía, “pues pensaba entregarme”. Sin embargo, a las 9:30 p.m., la Dirincri lo detuvo en el jirón Puno (Cercado de Lima) cuando iba a ver a uno de sus dos abogados.

Para la Dirincri su versión es contradictoria. Por ejemplo, Luciano dice que los somníferos que dio a sus compañeros los tomaba por prescripción médica, lo cual no ha sido acreditado con alguna receta. La policía presume que llevó las cápsulas para dopar a sus compañeros.

Los somníferos son difíciles de disolver en gaseosa, lo cual lleva a pensar que molió las pastillas antes de dárselas en alfajores, pues Sandro Herrera y Jhon Carbajal declararon que las bebidas estaban selladas y que el dulce no tenía nada raro.