Según Yahoo, “se ha estudiado que el cerebro trabaja más para entender la situaciones sarcásticas, lo cual fomenta que la inteligencia se desarrolle aún más”. Además, los investigadores sostienen que el tinte humorístico que guarda el sarcasmo baja la tensión de cualquier situación.
“Para identificar los comentarios sarcásticos, el cerebro funciona con los lóbulos temporales y el parahipocampo; mientras que el hemisferio izquierdo del cerebro es el responsable de interpretar las declaraciones literales.”, es decir que en el proceso captación e interpretación del sarcasmo se produce una interacción entre los dos hemisferios del cerebro, lo que se considera ejercicio para la inteligencia.