Embalsamados: la pasión de la izquierda por eternizar a sus líderes con rituales sagrados

Vladímir Lenin (1870-1924)

Político ruso. Líder la Revolución de Octubre y primer dirigente de la Unión Soviética. El cuerpo de Lenin fue embalsamado y expuesto en el Mausoleo de Lenin, de Moscú, donde todavía se puede ver hoy en día.

Hugo Chávez, el último de una larga lista de líderes embalsamados para la eternidad

"Como Ho Chi Minh, Lenin y Mao”. Así será embalsamado Hugo Chávez según las palabras de su sustituto provisional al frente de Venezuela, Nicolás Maduro. Por supuesto no son los únicos líderes que han sido embalsamados en el último siglo, pues figuras tan diversas como Kim Il Sung, Stalin, el Papa Juan XXIII o Evita Perón también pasaron por ello. De los principales líderes mundiales embalsamados en estos momentos, la inmensa mayoría son de izquierdas. ¿Por qué?

El halo “ritual, sagrado y mágico” en el Antiguo Egipto, como lo describe en un artículo el profesor de la Escuela de Filosofía Nueva Acrópolis en Granada Javier Pérez, continúa teniendo hoy su efecto para el culto de la persona. Aunque antiguamente se embalsamaba a todos los difuntos, la técnica cambiaba según el poder adquisitivo: desde el pobre, al que la familia le metía en la arena del desierto echándole un tipo de sal a cubrir con polvo de oro en el caso del faraón.

Todo comenzó incluso antes de la época del Antiguo Egipto, en Sudamérica también era habitual, varios santos han sido embalsamados… Como “la mayoría de religiones hablan de una vida en el más allá, antiguamente se preservaba el cuerpo para la vida futura”, explica Fidel Martínez, asesor de familias de Serveis Funeraris Integrals y coordinador de la Tanatopedia, una enciclopedia digital sobre usos y ritos funerarios.. Pero en las últimas décadas es una práctica que –al menos en los casos conocidos a nivel mundial- parece reservada principalmente a los mandatarios autocráticos de izquierdas.

Embalsamar a un líder sirve ahora para poder exponerlo ante el público tiempo después de su muerte y dar así la oportunidad no solo de honrar su memoria, sino de mantener presente su figura. “En el fondo, estamos hablando de un culto a la personalidad que se ha dado en religiones, en regímenes totalitarios o populistas… se pretende mantener a ese fantasma, que la persona siga presente aunque sea solo un cuerpo inerte”, comenta Martínez. La otra opción en la que se embalsama un cuerpo es para garantizar la seguridad sanitaria en casos de traslados de cuerpos en largas distancias

“Chávez dominaba la comunicación de masas a la perfección y parece que es algo que ha aprendido bien Nicolás Maduro”, apunta Luis Calandre para explicar por qué su cadáver va a ser embalsamado.

Este decano de la Facultad de Artes y Comunicación de la Universidad Europea de Madrid añade que “en un país acostumbrado a los gestos grandilocuentes y populistas, a las informaciones controladas por el Estado y a los discursos ampulosos e interminables parece absolutamente natural -y hasta imprescindible- un embalsamamiento que continúe ese discurso popular, grandilocuente y perpetuo al que se ha acostumbrado a los venezolanos”.

Calandre, doctor en Comunicación Audiovisual y Publicidad, opina que el embalsamamiento de Chávez se produce para “aprovechar el extraordinario ensimismamiento al que tenía sometido a gran parte del pueblo venezolano para poder alargar  todo lo posible un régimen asentado en gran parte en su extraordinario carisma -es innegable que lo tenía- y hasta me atrevería a decir que en su fotogenia y videogenia. Además de perpetuar el mito, existe la posibilidad de ganar ese bolivarianismo por asociación o cercanía con el mito”.

En este sentido, no debe perderse de vista el efecto de un Hugo Chávez embalsamado de cara a la próxima campaña electoral, que muchos analistas dan ya por comenzada extra oficiosamente con todos los actos de despedida de uno de los pocos líderes políticos que ha conseguido crear una ideología con su propio nombre.

Aún así, el profesor Calandre minimiza el impacto de su embalsamamiento: “Lógicamente ayudará a la representación y a la perpetuación de su aura, pero francamente no creo que eso vaya a tener gran impacto en la campaña electoral que se avecina. Enterrado o embalsamado Chávez se está convirtiendo en un mito y la campaña versará igualmente sobre las luces y las sombras de sus gobiernos al margen del  estado de sus restos”.

Fuente: www.lainformacion.com - María Torrens Tillack  - 10/03/13