El próximo domingo, los Merengues viajarán a Barcelona para disputar un clásico con cierto morbo, producto del camino que transitan ambos grandes del viejo continente, en esta ocasión sin Lionel Messi -lesionado- y Cristiano Ronaldo, después de 11 años.
"Yo no soy Casemiro", advirtió Toni Kroos durante las fechas FIFA, con respecto al nuevo rol que pretende el entrenador español de él. Una declaración que, según indicaron los medios locales, pudo haber molestado a Lopetegui, quien salió a responder días más tarde: "Kroos no es Casemiro, es evidente, ni al revés. Son diferentes hasta físicamente".
Lo que alimentó el rumor de un posible enfrentamiento entre el técnico y la figura germana fue que, tras sus dichos, el alemán ocupó un lugar en el banco y no participó ni un minuto del choque frente al Levante.
El malestar del mediocampista se suma a la portada que develó este lunes el portal italiano Tuttosport, en el que aseguró que "Marcelo quiere a la Juventus". El medio turinés afirmó que el brasileño pidió salir de la Casa Blanca en el próximo mercado de transferencias de enero para reunirse con Cristiano Ronaldo, a cambio de USD 60 millones aproximadamente.
La salida del luso fue un gran problema para el ataque del Real Madrid, que a pesar de tener a figuras como Karim Benzema o Gareth Bale, le cuesta horrores marcar más de un gol por partido. Es por eso que desde el medio madrileño COPE informaron que se está trabajando para el posible fichaje de Zlatan Ibrahimovic, hoy de gran presente en la MLS.
En medio de los rumores y especulaciones, Julen Lopetegui y sus jugadores deberán cambiar la mentalidad y pasar página del mal sabor de boca que les dejó la derrota ante el Levante para focalizarse en el domingo, día en el que visitarán el Camp Nou para medirse frente al líder del campeonato y su eterno rival, el Barcelona.
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