De hecho, cada vez son más los viajeros que deciden incluir en su itinerario un tour gastronómico de Málaga que les permita conocer a fondo los secretos de la comida del lugar, una que destaca tanto por su calidad como su variedad, de lo que dan cuenta estas opciones que vamos a mencionar.
Espeto de sardinas
Como siempre que hablamos de territorios con costas, uno de los principales atractivos culinarios de Málaga y sus alrededores son las preparaciones que llevan pescado como ingrediente principal.
Un buen ejemplo de ello es el espeto de sardinas, protagonista en varias de las mesas de los diferentes restaurantes locales, como así también de los chiringuitos, con precios al alcance de todo el mundo. La historia cuenta que los primeros espetos de sardinas datan del siglo XIX.
¿Cómo se preparan? Asando las sardinas por apenas cinco minutos en una caña, como si fuera una brocha, y añadiéndoles un poco de sal y algún otro condimento al gusto del comensal.
Ensalada malagueña
La ensalada malagueña es otro de los platos que no debes perderte si pasas un par de días en Málaga. Por su frescura, se lo recomienda más que nada en los meses de alta temperatura.
Se trata de una receta de las más típicas de esta parte de España, de manera que casi todos los bares y restaurantes la incluyen en su carta. Otra ventaja es que no es demasiado costosa.
Su combinación de sabores contempla elementos como las patatas cocidas, el huevo duro, la cebolla picada, naranjas, bacalao desalado y aceitunas aloreñas, habitués en la cocina andaluza. Todo esto se sirve con una pizca de sal, vinagre y aceite de oliva extra virgen, adquiriendo un sabor único.
Sushi, de la mano de los maestros
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