Rajoy no quiere golear a Sánchez en el debate para no hundirle

Así lo confirmaron las fuentes de la dirección nacional consultadas por Servimedia, que admiten en privado que hay "mucho riesgo" en el 'cara a cara' porque estamos ante la campaña más mediática de la historia, en la que más voto indeciso hay y en la que, por ese cóctel, más apoyos se deciden a través del plasma.

En el PP "firmarían un empate" con Sánchez en el debate porque, si Rajoy gana con superioridad y amortiza a Sánchez, nadie pasa por alto en Génova que eso les perjudicaría. Habría un traspaso de ese voto socialista, que según sus encuestas internas se situaría en el entorno del 18%, a Ciudadanos y Podemos, que estarían empatados con el PSOE en porcentajes muy similares.

Consciente de la importancia de una cita "decisiva", Rajoy tuvo su primera "toma de contacto" con el debate el pasado martes por la tarde, tal y como contó en una conversación informal con periodistas un día después en Palma de Mallorca.

Según fuentes populares y gubernametales, el candidato popular está encerrado en el Palacio de la Moncloa desde el sábado junto a sus colaboradores más cercanos, su jefe de gabinete y de campaña, Jorge Moragas, la secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez Castro, y su gurú de referencia, Pedro Arriola.

Inicialmente pensaba dedicar todo el fin de semana a preparar el debate, salvo el mitin de este domingo en Las Rozas (Madrid). Sin embargo, con el atentado talibán a la Embajada de España en Afganistán ha tenido menos tiempo del previsto, aunque este lunes también aprovechará para ensayar ante su primer debate de esta campaña electoral, tras haber rechazado los dos formatos a cuatro con los candidatos a la PresidenciaPedro Sánchez (PSOE), Albert Rivera (Ciudadanos) y Pablo Iglesias (Podemos).

Sánchez se la juega

En el PP se reafirman en la tesis de que hicieron bien aceptando sólo para Rajoy el tradicional debate entre el jefe del Ejecutivo y el líder de la oposición y ven positivo haber enviado a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a sustituirle al debate a cuatro de Atresmedia.

Argumentan que éste sí es "un debate de verdad", mientras que los anteriores lunes se trató de "entrevistas a cuatro" en las que los candidatos de la oposición se acabaron "pegando" entre ellos.

Creen que en la primera semana de campaña, Rajoy evitó perder votos como sí los perdió Sánchez por su actuación en el debate a cuatro. Subrayan, igualmente, que Rivera también desinfló sus expectativas.

Sin embargo, en Génova son conscientes de que Sánchez “se juega” este lunes "todo" tras una campaña que le ha perjudicado y unas encuestas a la baja ante las cuales no tiene nada que perder.

A este respecto, cuentan con que Sánchez va a salir "a por todas" porque es la única posibilidad que tiene de salvar los muebles y mantenerse como segunda fuerza política tras "no arriesgar" en los debates a tres y a cuatro.

Rajoy adelantó a mediados de semana que haría un debate “sensato”, “equilibrado” y “con propuestas de futuro”. “Yo me los tomo muy en serio”, dijo para apuntar que “respeta las reglas” y que, “no ensaya”, sólo "refresca" conceptos porque ya ha hecho “muchos debates”.

En este sentido, en La Moncloa defienden que Rajoy va a defender su gestión, porque "se lo sabe" y que el formato -estará separado de Sánchez por apenas un metro y medio- le permitirá ser "más cercano" e "intenso".

Ahora bien, en el PP no pasan por alto que el debate puede quedar marcado por la gestión del atentado contra la Embajada española en Kabul (Afganistán), así como por los casos de corrupción.

Fuentes populares rechazan que haya especial preocupación por el caso del embajador Gustavo de Arístegui y del diputado Pedro Gómez de la Serna por el supuesto cobro de comisiones millonarias en el extranjero, pero también reconocen que la jornada del jueves fue complicada y Sánchez se acogerá a este asunto y al levantamiento de sumario en el 'caso Rato' como tabla de salvación en un debate que condicionará la recta final de campaña hacia el 20 de diciembre.

FUENTE: lainformacion.com -13 de diciembre del 2015