Con su última norma, Washington también aspira a ampliar el uso de aviones no tripulados para supervisar las actividades en la frontera y a mejorar las comunicaciones entre las distintas agencias federales, al tiempo que confía en emprender nuevas investigaciones sobre el narcotráfico.
En un comunicado, la Casa Blanca confirmó la firma de Obama y repitió que, para el presidente, la seguridad de la frontera suroeste es una "prioridad". El mandatario señaló en la nota difundida tras la votación del jueves en el Senado que la nueva legislación ayudará a "proteger a las comunidades de la frontera suroeste y todo el país" y "reforzará" la alianza con México en la lucha común contra el crimen organizado.