De acuerdo con las declaraciones de Piñera, el 10 por ciento más rico de la población de Chile tiene ingresos 35 veces más altos que el 10 por ciento más pobre, es decir una disminución en los niveles de desigualdad respecto con el año de 2009, cuando la diferencia era de 46 veces.
El sondeo de la Casen muestra que la cifra de pobreza en Chile ha bajado de 15, 1 por ciento en 2009 a un 14, 4 por ciento en 2011.
El mandatario chileno señaló que la creación de 700 mil puestos de empleo fue uno de los factores que facilitaron un descenso en los niveles de desigualdad en su país.
No obstante, considerando que Chile "tiene un problema de desigualdad demasiado grande", Piñera ratificó la necesidad de "seguir trabajando".
Los más de 17 millones de chilenos promedian índices de calidad de vida, crecimiento económico, desarrollo humano, globalización y Producto Interior Bruto (PIB) per cápita que se encuentran entre los más altos de América Latina.
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