Quien tuvo el honor de pronunciarlo por primera vez fue el destacado deportista belga Victor Boin, participante en las dos ediciones anteriores de los Juegos, esgrimista y waterpolista, quién posteriormente ocuparía los cargos de Presidente del Comité Olímpico de su país y Presidente de la Asociación Internacional de la Prensa Deportiva.
La primera vez que este Juramento Olímpico fue escuchado por el mundo ocurrió en ocasión de la inauguración de los Juegos de 1928 en Amsterdam, gracias a la primera transmisión en directo por radio.