La primera ministra británica, Theresa May, y su homólogo japonés, Shinzo Abe, condenaron este viernes la "provocación" de Corea del Norte y prometieron mantener la presión internacional para que suspenda su programa nuclear y de misiles balísticos.
"Mientras nos reunimos aquí, Corea del Norte continúa realizando acciones provocativas en la región Asia-Pacífico", señaló May en un comunicado conjunto después de reunirse con Abe en Chequers, su residencia en las afueras de Londres, citó DPA.
"Y el Consejo de Seguridad de la ONU está reunido en Nueva York para debatir este mismo tema", añadió la primera ministra.
"Ante esta beligerancia, mantenemos nuestra firme condena de este tipo de actividad desestabilizadora", dijo May, que añadió que las pruebas nucleares y de misiles de Pyongyang violaron resoluciones de la ONU y representaron "un riesgo para la paz global y la estabilidad".
"El primer ministro Abe y yo acordamos que seguiremos trabajando con nuestros socios internacionales para mantener la presión sobre Corea del Norte y oponernos a la amenaza de seguridad que representa su intento ilegal de hacerse con armas nucleares, además de trabajar para una solución pacífica", aseguró.
May y Abe también hablaron sobre la decisión de Reino Unido de dejar la Unión Europea (UE) y la cooperación bilateral de cara a la cumbre del G7 de este año.
"La relación de Reino Unido con Japón es vital para nuestra prosperidad y seguridad", añadió.
May apuntó que las compañías japonesas han invertido más de 40.000 millones de libras (52.000 millones de dólares) y han empleado a unas 140.000 personas en Reino Unido.
"Desde la votación a favor de la Brexit, los empresarios japoneses continuaron mostrando su confianza en el Reino Unido", destacó.
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