Viviendas modulares, la alternativa del futuro

Actualmente prima la funcionalidad, casas prácticas y cómodamente habitables durante años, pero también se busca rapidez en la adquisición, así como compromiso con el medio ambiente y materiales sostenibles y que colaboren en la conservación del entorno, sin olvidar la eficiencia energética. Todos estos factores declinan la balanza hacia un tipo de construcciones que pocos a poco se van dando a conocer entre los compradores, se trata de las casas modulares de diseño.
Las viviendas modulares son residencias construidas en módulos de caja separados que luego se fijan entre sí para formar la casa completa. Las condiciones en las que se construyen están altamente controladas y deben cumplir sin excepción con estrictos requisitos y controles de calidad antes de ser entregadas definitivamente a sus futuros habitantes. Los módulos llegan como segmentos de bloques y se unen y encajan perfectamente utilizando grúas gracias dando como resultado viviendas indistinguibles de las tradicionales. Su construcción Interior les proporciona mayor resistencia y capacidad de recuperación de la inversión. Además, los expertos aseguran que las casas modulares son mucho más resistentes a los climas adversos
Es muy común confundir las casas modulares con las casas prefabricadas, pero no son lo mismo, la primera hace referencia a uno solo de los tipos de la segunda, que cumple con otra serie de requisitos. La casa prefabricada es en general aquella vivienda construida a partir de secciones estandarizadas, que son fabricadas con antelación fuera de su lugar de emplazamiento y posteriormente enviadas a su ubicación definitiva para su ensamblaje final. El término modular tan sólo indica que la construcción e cuestión sigue un módulo tipo que siempre se repite.
Entre las ventajas de decantarse por la compra de una vivienda modular se encuentran la rapidez en la construcción y el bajo coste. El precio de una vivienda tradicional puede variar considerablemente dependiendo de su ubicación y de la oferta y la demanda, sin embargo, en una vivienda modular el precio fluctúa menos por que no se está pagando por un lugar en concreto. Además son fáciles de mover ofreciendo flexibilidad de desplazamiento. El tiempo de construcción es sin duda uno de los principales beneficios, se tarda de media entre un 50% y un 65% menos en levantar una casa modular que una vivienda convencional. Por último es sostenible, una de las principales exigencias de los nuevos consumidores, el uso de materiales mejora día a día utilizando materias primas ecoeficientes que ayudan a mejorar el aislamiento.
Otra alternativa es la elección de una casa prefabricada de hormigón, que aunque es una alternativa aún poco conocida en nuestro país ya existen empresas dedicadas a su construcción.