UE incluirá referencia a velocidades de avance en texto base

El texto por el 60 aniversario del Tratado de Roma la UE hará referencia a velocidades de avance interno. Texto de la UE señala que dejará la puerta abierta a aquellos que quieran unirse más adelante.

La Declaración de Roma, que los líderes de 27 países comunitarios (sin el Reino Unido) y las instituciones europeas prevén aprobar el próximo sábado, incluye una referencia de tono menor a la posibilidad de avanzar en el futuro a distintas velocidades, opción que preocupa a los países del Este.

El documento, que este lunes debatieron los negociadores de los Estados miembros (los llamados "sherpas") y al que tuvo acceso Efe, indica que la futura Unión Europea (UE) a 27, tras la salida del Reino Unido, trabajará "unida, cuando sea posible, y a diferentes ritmos e intensidad, cuando sea necesario, como hemos hecho en el pasado en el marco del Tratado".

Señala que se dejará "la puerta abierta a aquellos que quieran unirse más tarde".

El texto ha sido enviado ahora a los Estados miembros, que terminarán de perfilarlo, de cara a la cumbre que la capital italiana acogerá el 25 de marzo, con motivo del 60 aniversario del Tratado de Roma, un evento que, según el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, marcará el "nacimiento de la UE", tras la Brexit, la salida del Reino Unido del bloque comunitario.

Fuentes europeas aseguraron que en la reunión del lunes quedó patente que todos los países se sienten cómodos con el documento y recalcaron que nunca ha existido realmente una disputa entre los socios del Este y el oeste de la UE sobre la idea de avanzar a diferentes velocidades, uno de los cinco escenarios planteados por la Comisión Europea de cara al futuro.

Precisaron que los Estados del Este solo han insistido en la necesidad de evitar una Unión "a dos velocidades" y que la posibilidad de trabajar en ciertos ámbitos en grupos es una opción prevista en la legislación actual y que ya se da en áreas como la justicia, en la que 17 países quieren crear una Fiscalía europea.

Sin embargo, en la última cumbre a 27, el 10 de marzo, varios miembros, incluidos Polonia y Hungría, dejaron claro que les disgustaba la posibilidad de una Europa que promueva la cooperación a diferentes velocidades, por temor a quedar excluidos.

"Algunos de nuestros colegas lo ven como introducir una nueva línea divisoria, un tipo de nuevo telón de acero entre el este y el oeste. No es la intención", aseguró Juncker.

Para responder a esos temores, en la Declaración de Roma los países subrayarán su deseo de aumentar la unidad y la solidaridad entre ellos.

"La unidad es a la vez necesidad y nuestra libre elección. Tratados de manera individual seríamos dejados de lado por las dinámicas globales. Permanecer juntos es nuestra mejor oportunidad de influir en ellas y de defender nuestros intereses y valores comunes", señala el texto.

La declaración identifica cuatro áreas básicas en las que trabajar en el futuro: la seguridad, la economía, la política social y la defensa.

Subraya que los ciudadanos han de sentirse seguros y poder moverse con libertad en la UE, que las fronteras externas tienen que ser seguras y la inmigración se debe gestionar de manera efectiva.

También destaca la necesidad de crear crecimiento y de reforzar el euro, así como de promover el progreso económico y social y la cohesión y la convergencia.

Menciona la necesidad de avanzar en seguridad y defensa con una industria europea más integrada.

"En los próximos diez años queremos una Unión segura, próspera y sostenible que haga hincapié en la dimensión social y con la voluntad y capacidad de jugar un papel en la escena global", puntualiza el texto, que pasa revista además a los logros de la UE y a los desafíos, entre los que menciona el terrorismo, la inmigración o el proteccionismo.